Body Sushi

Queridos lectores y Guarrill@s, amantes del sexo y el amor...

Con la llegada de la Primavera, "que la sangre altera", las hormonas están más revolucionas que nunca. Por lo tanto aprovecho para dar ideas sobre cómo sorprender a tu pareja, y/o follamigo. Los juegos eróticos y modalidades están inventados para acabar con la monotonía y la costumbre sexual. Hoy voy a hablar de la modalidad “Body Sushi”.

En una de las escenas de apertura de “Mapa de los sonidos de Tokio”, la película más reciente de Isabel Coixet, una cena muy especial en el piso más alto de un rascacielos de Barcelona está teniendo lugar. Una mujer deslumbrante y totalmente desnuda está tumbada sobre una mesa, cubierta con diferentes tipos de sushi, sashimi y otras delicias japonesas, y rodeada por un grupo de hombres afortunados listos para disfrutar de la comida.

Esta es la esencia de nyotaimori (literalmente presentación sobre cuerpo femenino), también conocido como “body sushi” o sushi corporal: es el arte tradicional japonés de servir comida sobre el cuerpo femenino de una modelo actuando como una bandeja humana. Bonitas hojas de plátano se emplean generalmente para evitar tocar los alimentos directamente de la piel de la modelo, y decoraciones florales están presentes también para ocultar o mejorar las partes más íntimas del cuerpo. El calor corporal de la modelo mantiene al sushi a la temperatura correcta: esto permite convertir la velada no sólo en una cena sensual y excitante, sino también en una experiencia gastronómica única.

Siempre ha habido mucha controversia acerca del body sushi. Desde acusaciones de sexismo a insinuaciones de que este tipo de cenas sólo existen en novelas y en el cine. La primera objeción es fácil descartar, ya que también hay modelos masculinos que actúan como bandejas humanas en este tipo de eventos. En este caso, la palabra precisa sería nantaimori (presentación sobre cuerpo masculino). En cuanto a la segunda objeción de que el sushi corporal es sólo ficción… Bien, ésta es aún más fácil de refutar: hay un sitio en Barcelona donde puedes disfrutar de un nyotaimori auténtico. Un lugar muy especial que no se encuentra en lo alto de un rascacielos, pero sí en el fondo de un sótano en el barrio del céntrico y animado barrio del Raval.

El Nido del Escorpión es una asociación sin ánimo de lucro dedicada a la cultura japonesa, a la gastronomía y a los amantes de las fiestas y actividades BDSM. Unos de sus eventos más importantes son los nyotaimoris una vez al mes, destinados a un público reducido de gente de no más de nueve o diez personas. Los anfitriones de la asociación tratan de dar un ambiente sensual, elegante y amistoso a las cenas, y también se encargan de que nadie le falte el respeto a las modelos. 

Actualmente, este juego muy interesante y sensual, también se está usando para sorprender a las respectivas parejas. El mejor momento para hacerlo es cuando tu pareja está a punto de llegar a casa después de un día duro de trabajo…

Son las 19:00 y se me ocurre una gran idea para prepararle una sorpresa a Fernando. La monotonía está actualmente en nuestras vidas. Ya no me desea como antes, no me hace el amor, no me besa…No me empotra contra la pared. Estoy confusa y muy caliente. He visto en “Conexión Samanta” un nuevo juego en el que la mujer hace de bandeja humana y les sirve Sushi en su cuerpo a hombres de negocios. Me parece realmente interesante, asique lo preparo todo. A las 21:15 me tumbo en la mesa del salón y voy cubriendo aquellas partes de mi cuerpo que a él le encanta. Me pongo sushi y variadas comidas japonesas. Media hora más tarde escucho la puerta y me dispongo, nerviosa, a esperarle.

-¿Cariño, donde estás?...Ya estoy en casa.

-Estoy aquí poniéndote la cena. –Respondo con voz sensual y melódica.

De pronto veo por el espejo de la chimenea unos ojos saltones y una boca abierta. Me pregunta si yo era su cena. Tenía que haber respondido que era el plato de su cena, pero no me dio tiempo. Se acerca. Sonríe. No sabe por dónde empezar. Coge uno de los rollitos que se caen y lo pone en mi boca. Se lo come. Me besa. Baja poco a poco por mi cuello besándome y siento como su respiración me hace cosquillas. Estoy realmente excitada. No llega a comerse el rollito del ombligo cuando empieza a comerme a mí. Me besa entre los pechos, me los chupa…Uff, como me pone. Seguidamente y después de besarme todo el cuerpo, me hace el amor como nunca lo había hecho. Acabé haciendo cosas que jamás pensaría en hacerlas. Por ejemplo, aquello de poner su miembro entre mis pechos y hacerle una masturbación llamada Cubana. También me puso mucho que "terminase" encima de mi cuerpo, cómo si aún fuese un plato...Me encantó. Ahora me da morbo el sexo anal, por lo que espero probarlo y que mi chico me posea más habitualmente.

Sr. Steve